miércoles, 9 de julio de 2014

“Zendagi migzara”: la vida sigue.

Nunca hubiera pensado que llegaría a dar gracias por haber dejado de ser joven, por haber perdido la frescura y sensibilidad, porque la savia ya no corriera por mis venas.  El barniz de los primeros años ha quedado desgastado. En ocasiones desearía que me hubieran dado varias capas, que fuera  una coraza que me impidiera oír tus gritos de terror. Imaginar que todo está como estuvo en un principio, sin golpes ni arañazos. Sin más contusiones en las patas que las de los pies de una familia que se sienta a mi alrededor a la hora de comer. Sin moretones en tu cara, sólo mis pardas vetas.  De otra forma, me resquebrajaría en astillas con las que torturarlo.
No te sientas sola, mujer, porque mis ojos todo lo ven, no pienses que nadie te escucha porque mis anillos todo lo tienen grabado. No te creas hierba frágil porque la violencia es el recurso del débil, del que tiene miedo de que el resto contemple la belleza de tus flores, la dulzura de tus frutos. Yérguete y crece fuerte.


Colaboración para el blog Seis Segundos.

7 comentarios:

  1. Ojalá algún día esto lo hayamos superado y los relatos así sean de ficción. Qué triste realidad...

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    1. No tengo más que añadir a tus palabras. Ojalá que todo fueran cuentos inventados.

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  2. Escribes cosas muy lindas, bueno, que te hacen pensar y eso me agrada!
    Saludos :D

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    1. Gracias a ti por tus palabras y por la visita. Esperemos que no sea la última.

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  3. Ojalá sobre cada mesa del mundo, cuando la gente se sienta alrededor de ella, come, juega, charla, ríe, discute, la gente cotidiana, la ahora mismo pone platos sobre la mesa, o tapas o cañas, tuviesen un tiempo para, como tú, reparar en esa mancha, ya reseca sobre su superficie, de grito color sangre.

    Tu mesa no se apaga, no dejaremos que lo haga

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    1. Ay las mesas, estas mesas...jeje, la de quebraderos de cabeza que me han dado. Lo que me costó encontrarla, teniéndola tan cerca.

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  4. Mas cerca aún tienes las palabras, y menudo revuelo están formando dentro de ti! No sé como puedes permanecer sin escribirlas :)
    Seguro que son infinidad, que están llenas de momentos, y no quieren ser escritas por nadie mas que por ti, sencillamente porque son tuyas.

    Desde esta otra espera, deseo que pronto no tenga que esperar mas para volver a leerte :)

    Gracias de nuevo!!

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